El azafrán como remedio para la depresión
Como alternativa homeopática, se dice que el azafrán es eficaz para combatir la depresión, es decir, que actúa de igual manera que los anti-depresivos tradicionales.
En un estudio científico publicado por la Universidad de Arak de Ciencias Médicas, en noviembre de 2006, se evidencia que el azafrán tiene un excelente efecto contra la depresión. El estudio se realizó en dos grupos durante un plazo de 6 semanas, en donde se proporcionó 0,03 g a un grupo y 0,0 g al otro, por día. Se observó que el grupo que consumió azafrán obtuvo un resultado significativamente mejorado en el estado de ánimo depresivo. Con respecto al segundo grupo se observó la presencia de otros signos de depresión, tales como desórdenes del cerebro, entre otros. Al al término de la investigación, todos los pacientes que fueron tratados con azafrán concluyeron el tratamiento mucho antes que los pacientes que recibieron un tratamiento placebo.
El consumo de aproximadamente 0,03 g de azafrán se equipara con la toma de imipramina de 1g (por día), el aspecto positivo del consumo de azafrán es que presenta mucho menos efectos secundarios que un tratamiento tradicional.
El azafrán por su modo de acción extraordinariamente tranquilizante puede ayudar también a calmar estados nerviosos, así como también trastornos de sueño. Ambos influyen en el desencadenamiento de un estado depresivo. Es por esta razón que el azafrán puede ser empleado también favorablemente como medio de relajación con lo que se puede disminuir el estrés automáticamente.
Los efectos psico-activos del azafrán pueden actuar como excitadores - estimuladores del sistema nervioso. Con ello el paciente vuelve a sentir la alegría de vivir y el buen humor. El azafrán, por lo tanto, puede ayudar a recuperar el equilibrio interior, y también tiene una influencia positiva en el balance de la energía.