Azafrán - falsificaciones y sustitutos
El hecho de que el azafrán sea casi igual de costoso que el oro, siempre lleva a la gente a hacer o a buscar falsificaciones en el mercado. Es por ello, que al momento de realizar la compra de un verdadero azafrán y de buena calidad, se debe tener especial cuidado al realizar la compra.
Por lo tanto, se recomienda comprar azafrán sólo en lugares de confianza, y comprarlo en hebras enteras, ya que esa es la única manera de ver si realmente es azafrán real. El azafrán también es vendido pulverizado, es decir, en polvo; pero puede que éste no sea el verdadero - incluso es presentado con su tono amarillento tradicional - pero no contiene ningún sabor típico de azafrán.
Se sugiere cerciorarse bien y con gran precisión de que las hebras estén enteras y que sean realmente hebras de azafrán y no de otros pistilos comunes. Este último es el "azafrán falso" de los pétalos de la cártamo, Carthamus tinctorius. Esto no es azafrán verdadero. A pesar de que tenga el mismo color amarillo, carece del agradable aroma característico del azafrán.
Existe una prueba que se puede realizar para verificar la autenticidad del azafrán y ésta se realiza mezclando el azafrán con bicarbonato de sodio y agua - luego de hacer la mezcla - la coloración del agua del verdadero azafrán debe ser amarillenta, mientras que del falso es de un rojo oscuro.
